La oferta musical que tiene nuestra Ciudad de México, es sumamente variada y rica: solistas, duetos, grupos, todos ellos despliegan sus dotes artísticas ante sus audiencias, pero pocas veces tiene una la oportunidad de asistir a un concierto en el cual los ejecutantes entreguen su sensibilidad y compartan al mismo tiempo, con toda honestidad, sus historias de vida.
Lo anterior sucedió en el Concierto de Trova dedicado a las madres de nuestra Comunidad de Santa Mónica, evento organizado por el Ministerio de Cultura. El dueto, formado por Kary Ocampo y Joel Fuentes (Lobo) nos hizo vivir momentos intensos de nostalgia y alegría, sus interpretaciones incluyeron música latinoamericana y española, canciones algunas que han dado la vuelta al mundo, siendo interpretadas en varios idiomas, ejemplo de ello es: Bésame mucho de Consuelo Velázquez, también ejecutaron canciones que son de su autoría, en las cuales, haciendo derroche de habilidad y destreza en tocar la guitarra y las percusiones, nos entregaron parte de su esencia, su sensibilidad exquisita y sus deseos de vivir en un mundo sin guerra, donde prevalezcan el amor y la paz.
Dueños de hermosas voces, las cuales se complementan a la perfección, hicieron que la tarde- noche se fuera en un suspiro y ¿cómo no iba a ser así? Estamos hablando de un dueto que se formó hace 10 años y que se robusteció durante la pandemia, a través de una idea genial que fue crear el Lobi Bar en Línea, cuyas transmisiones llegaron además de México, a España, Alemania, Estados Unidos y Singapur; de hecho, el gobierno de México a través de su Embajada en Singapur, le invitó a participar en las fiestas patrias del 2022, así como en el Festival Crossing Borders en dicho país.
En cuanto comenzaron su presentación, lograron una íntima conexión con la audiencia, lo cual no pasó inadvertido a nadie; la gente se entregó por completo a Kary y Lobo, en el momento en que ambos invitaron a los asistentes a cantar junto con ellos, logrando una fusión que pocas veces hemos visto en nuestro templo de Santa Mónica, cuando se ha convertido en sala de conciertos.
Kary tiene un gran patrimonio en la música afro antillana y es la percusionista así como cantante, mientras que Lobo aporta una gran experiencia en tocar la guitarra, el bajo, también es cantante y arreglista. Sabemos que este dueto seguirá por el sendero del éxito profesional y personal, su trayectoria así lo indica y esperamos recibirle nuevamente en un futuro próximo.
Al terminar el concierto, se les entregó un reconocimiento por parte de la Comunidad de Santa Mónica, agradeciendo su magistral participación y los felices momentos que nos hicieron vivir, mismo que recibieron con una gran sonrisa.
Colaboración: Mari Carmen Benítez Rincón. Ministerio de Comunicación.