El sábado 7 de diciembre tuvimos el inmenso gusto de celebrar el 60 aniversario de la ordenación sacerdotal de nuestro querido fraile Wilfrido Yépez López, festejo esperado por toda la feligresía.
Fray Wilfrido concelebró con los frailes Manuel Antonio Flores García, coordinador de vocaciones en el seminario ubicado en Calzada del Hueso y con fray Manuel Abecia Marquínez, vicario coordinador de vocaciones de la rectoría de Santa Mónica.
Tuvimos una celebración sobria, fray Wil (como cariñosamente le llamamos) iba revestido con una casulla dorada, misma que realzó más aún el decorado de la iglesia y el festejo del fraile.
En su homilía, fray Wil dio gracias a Dios por todos los religiosos y sacerdotes que han escuchado Su llamado; agradeció haber sido escogido por Él para ingresar al seminario, lo cual hizo a los 11 años y, que el Señor hubiera enviado a su pueblo Yuriria, Guanajuato, a un religioso agustino recoleto a buscar chicos con deseos de ser religiosos, así como que le hubiera elegido para formar parte de la familia agustino recoleta.
Profundamente conmovido contó parte de su historia de vida como fraile y sacerdote, compartió con la feligresía que estuvo en Querétaro y también en España; agradeció a la gente que le ha acompañado a lo largo de su vida, que ha orado por él, que le ha dado reconocimiento como ser humano, fraile y sacerdote, que le ha ayudado a ver la presencia de Dios en todas partes.
Con voz enronquecida por la emoción, agradeció la ovación, que poniéndose de pie, le hiciera la feligresía, pequeño tributo a la labor que como vicario ha desarrollado en nuestra comunidad de Santa Mónica. Al finalizar la misa, fray Melchor, nuestro rector, recordó a los asistentes que estaban cordialmente invitados a departir con fray Wil en el salón San Agustín, donde se le había preparado un convivio al cual asistieron hermanos de comunidad, como son fray Antonio Rada, fray Manuel Antonio Flores, los frailes de Santa Mónica y feligresía en general.
Un emotivo video, preparado por miembros de MESAC (Ministros Extraordinarios de la Sagrada Comunión) nos mostró el camino que ha recorrido fray Wil, desde su nacimiento, en el estado de Guanajuato, pasando por su entrañable familia, el seminario en México y en España, así como su fructífera carrera como director del Colegio Fray Luis de León, como vicario y ecónomo en Santa Mónica; también nos mostró el lado divertido de fray Wil, lo cual resultó sorpresa para algunos; los que lo conocemos sabemos cómo es él: un “tipazo”, un ser humano maravilloso y entregado por completo al Señor.
En el salón San Agustín, compartimos ricos bocadillos, así como refrescos y vino, la ocasión lo ameritaba y por supuesto, no faltó el tradicional canto de Las Mañanitas así como partir el pastel por parte del festejado.
Fray Wil se dio el tiempo para saludar a los asistentes, entre ellos gente que le conoce desde que fue ordenado sacerdote hace 60 años; la gente estuvo encantada, participando de un ambiente de alegría y deseándole toda clase de parabienes, pero sobre todo, que Dios le conserve con salud y bienestar durante muchos años por venir.
Colaboración: Mari Carmen Benítez Rincón. Ministerio de Comunicación